Hoy vi algo extraño, que no imaginé ver...
En una acera, en pleno San José, estaba sentada una mujer: Tenía el cabello enmarañado, sucio, como una melcocha puesta al sol. Su piel sucia y su ropa rota.
Era una indigente sentada en la calle...esto no parece fuera de lo común. Lo extaño era lo que estaba haciendo... Se sacaba las cejas con unas pinzas y un espejito redondo (me recordó a mis compañeras del cole en algún pasillo)...yo ni me saco las cejas, y ella intentando sentirse bella a pesar de sus circunstancias se aferraba a sus últimos vestigios de placer, de sentirse bien con su imagen.
Muy extraño...
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1 Reflejados:
La verdadera clase y la elegancia nunca se pierde :)
Besos
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